Galletas doradas de Pascua
Recuerdo como muy divertidos los días que pasé probándome vestidos de novia junto a mi hermana M. y mi madre. Las tiendas de novia son generalmente algo pomposas, te rodean de espejos a lo Dama de Shangai y en algunas incluso te suben a un pedestal mientras una pobre señora se agazapa ahí abajo para llenar de alfileres un dobladillo eterno. Toda una experiencia. Uno de los vestidos que me probé me fascinó absolutamente, pero la imponente tela de flores de encaje dorado me pareció un poco demasiado, como si fuera para una princesa o una boda más importante que la mía; al final me compré uno que me encantaba pero más sencillo. Cobarde de mí. Como ese vestidazo se me quedó en la retina y aún faltan más de dos años para que me lo compre -la fiesta de los 10 promete- he decidido que mientras tanto habrá de ser una galleta la elegante, dorada, imponente y digna de una boda principesca. Las cookies de Pascua o Easter son un básico de cualquier aficionado a las galletas, y como otros años ya las hice de Easter …