Calabazas de Halloween
Soy muy pesada contando la fiesta tan maravillosa que es Halloween en Estados Unidos. Al menos para nosotros siempre fue una fiesta familiar, en la que los niños podían ponerse su disfraz favorito -no necesariamente terrorífico, puede ser de princesa o de Spiderman– y salir por el barrio a buscar dulces al grito de ¡Truco o trato!. Los niños disfrutan enormemente caminando ellos solos, recaudando golosinas que luego no se pueden ni comer; los padres van unos pasos detrás con su vasito de vino disimulado, y con el placer añadido de poder cotillear el recibidor de todas las casas del vecindario. Una fiesta encantadora. Desgraciadamente la importación que hemos hecho en España es bastante hortera, mucho zombie y mucha vampiresa; nada que ver. Por eso hice estas calabazas disfrazadas, para reivindicar la inocencia de la noche de Halloween que siempre vivimos en nuestra casita de Coral Gables. Para hacer estas niñas calabaza necesitaremos hornear, obviamente, unas galletas con forma de calabaza. Luego con un lápiz no tóxico haremos unas guías para la decoración; en unas sólo trazaremos las líneas de …